Tasa De Errores en Multinivel

Tasa De Errores en Multinivel

Simplemente querría haceros una pregunta:

¿Has duplicado tu Tasa de Errores?

Atención, error no significa enviar un email sin acentos o no meter a un cliente en tu tabla de excel, a eso se le llama chapuza.

Cuando digo error, me refiero a que inicies un proyecto cuyo resultado no está garantizado y si te equivocas, ya aprenderás algo por el camino. Y recuerda, siempre jugándote todo lo que puedas perder, sin que te pase nada, al máximo riesgo.

Mi invitación es que hagáis esto y dupliquéis vuestra tasa de errores, porque a mí en parte me está dando muy buenos resultados, me está funcionando muy bien.

Inicia proyectos, en los cuales no sabes si vas acertar o te vas a equivocar. Juégatela. Equivócate cada año un poquito más.

Aunque solo equivocarse o duplicar tu tasa de errores, no sirve de nada. Debes obtener lo que llamamos aprendizaje validado.

Por ejemplo, si tú montas un restaurante, pones un menú indio en tu restaurante y no te lo compra nadie, has obtenido un aprendizaje validado. Y es que en tu zona nadie consume comida india. Te has equivocado, pero has sacado una enseñanza.

En el mundo en el que vivimos necesitamos innovar y yo quiero explicar bien este concepto:

Antes innovar sonaba a gran empresa, hoy cada pequeño autónomo debe innovar en su trabajo. Y no hay manera de innovar, sin perder el miedo al error. Innovar siempre ha significado meterse en el mundo de lo desconocido, y para que el mundo de lo desconocido se vuelva familiar, debes duplicar tu tasa de errores. Aprender en base al error es fundamental.

Ahora bien, innova pero no inventes la rueda. Tanto en Marketing Multinivel como en la vida, la rueda esta inventada. Yo me refiero a que innoves en tu vida.

Por ejemplo, si quieres ser una persona de éxito en Marketing Multinivel, pregúntale a una persona que ya ha conseguido ese éxito como lo puedes hacer o léete sus libros o mírate sus vídeos.

A mí me gustaría que te hicieses una pregunta cada vez que vayas hacer alguna tarea y con ello duplicar tu tasa de errores:

¿Si hago esto, qué es lo peor que me podría pasar?

Si sabes lo peor que te podría pasar, sabes si puedes jugar la partida o no. Y si lo peor que podría pasar lo puedes afrontar, quiero que te hagas la siguiente pregunta:

Entonces, ¿Por qué no?